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Libertad

Una a favor del pueblo: la Corte Suprema de EEUU dictaminó que la portación de armas es un derecho fundamental

La Justicia del país norteamericano falla a favor de los estadounidenses que quieren mantener su libertad y defender la Constitución.

“Las armas de fuego son las segundas en importancia tan solo después de la Constitución, ellas son los dientes de la libertad de la gente” fue una de las tantas frases que George Washington inmortalizó en el tiempo, ya que una población indefensa puede caer fácilmente en manos de un autócrata.


El día de hoy la Corte Suprema de Estados Unidos dictaminó que los estadounidenses tienen el “derecho fundamental” de portar armas de fuego en público. El fallo anula una decisión de Nueva York que pedía que una persona demostrara que tenía necesidades legítimas de defensa personal para recibir un permiso de armas.

“El requisito de causa justificada de Nueva York viola la Decimocuarta Enmienda al impedir que los ciudadanos respetuosos de la ley con necesidades ordinarias de autodefensa ejerzan su derecho de la Segunda Enmienda de poseer y portar armas en público”, dice la decisión.

Tras conocerse la noticia, la Asociación Nacional del Rifle (NRA) dijo que una milicia bien organizada es necesaria para la seguridad de un Estado libre. “No se infringirá el derecho del pueblo a poseer y portar armas”, sentenciaron.

Los datos evidencian que los Estados con menores regulaciones al control de armas son mayoritariamente leales al Partido Republicano, y tienen los índices de inseguridad y homicidios más bajos del mundo, gracias al poder de disuasión que representan, muy al contrario de los Estados históricamente demócratas que poseen de las tasas de delitos más altas del mundo.


Sin embargo, el Partido Demócrata lleva años queriendo debilitar a la población con la eliminación de las armas de fuego, ya que un pueblo armado puede defenderse de un tirano, tal como lo está intentado el presidente de Estados Unidos Joe Biden, que ganó las últimas elecciones en medio del escándalo causado por el fraude electoral, haciendo dudar de su legitimidad en el cargo, convirtiéndolo en un personaje que pone en grave peligro la institucionalidad de la nación.


Por su parte, la senadora demócrata Elizabeth Warren lamentó la decisión: “a raíz de la horrible violencia con armas de fuego en Buffalo y Uvalde, la mayoría conservadora radical de la Corte Suprema nos ha llevado más atrás, debilitando unilateralmente las leyes de seguridad de armas en todo el país”.

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